United Faculty, sindicato de la facultad de UNI, se opone a varios proyectos de ley que fueron aprobados recientemente por la Cámara de Representantes de Iowa y que dañarían gravemente a la Universidad del Norte de Iowa, la Universidad de Iowa State y la Universidad de Iowa.
Los tres proyectos de ley, HF 269 (la ley que se llama “Libertad contra el Adoctrinamiento”), HF 295 (la ley de “Autonomía frente a la Acreditación), y HF 401 (la ley del “Currículo Troncal”) tienen la intención de censurar a la facultad de las universidades y forzar a las universidades y sus currículos a adoptar una agenda que socava la investigación crítica, la libertad de expresión y las opciones para los estudiantes.
“Los tres proyectos de ley censuran a la facultad de la universidad y prohíben la discusión en carreras, especialidades secundarias y cursos individuales, de numerosos temas básicos que tienen conexión con la raza, el género y la desigualdad”, afirmó Christopher Martin, presidente de United Faculty. “Estos proyectos de ley destruyen la esencia de la educación universitaria: la investigación crítica, la libertad de expresión y la capacidad de permitir que los estudiantes elijan libremente lo que quieren estudiar. En cambio, los proyectos de ley respaldan una agenda radical que busca silenciar la libertad de expresión y violan la Primera Enmienda”.
Los tres proyectos de ley que harían un gran daño a las universidades públicas de Iowa:
Este proyecto de ley prohíbe los contenidos académicos que “promuevan la idea de que las leyes, políticas o instituciones racialmente neutras o sin sesgo de color perpetúan la opresión, la injusticia, el privilegio basado en la raza —incluyendo la supremacía blanca o el privilegio blanco— o la inequidad, al no hacer diferencias activas por motivos de raza, sexo o género”, para los programas académicos, las especializaciones primarias y secundarias o los requisitos de certificación. En otras palabras, el gobierno estatal ejercería una restricción previa (o lo que es lo mismo, la definición legal de censura) sobre lo que un miembro de la facultad puede enseñar en un curso o programa de grado académico.
Este proyecto de ley es una amenaza existencial para áreas académicas como sociología, trabajo social, ciencias políticas, comunicación y medios, inglés, psicología, educación, historia y otros programas. Si los instructores no pueden hablar sobre estos temas, no podrán enseñar cursos obligatorios en sus programas, y sus estudiantes no podrán aprender. Miles de estudiantes que pagan matrícula en las tres universidades podrían perder sus especializaciones primarias o secundarias porque sus áreas temáticas centrales, o las mismas especializaciones, estarían prohibidas. También perjudicará la posibilidad de que las universidades estatales recluten estudiantes de otros estados (pregrado y posgrado) que deseen estudiar en estos campos si las universidades públicas de Iowa no pueden ofrecer los planes de estudio que se esperan dentro de sus disciplinas. Los estudiantes se irán a otro lugar.
Este proyecto de ley pone a los programas de UNI con acreditación externa en desventaja en comparación con las universidades de otros estados. Los estándares propuestos por el estado de Iowa estarían en conflicto con los altos estándares nacionales de las agencias de acreditación que evalúan y certifican a los programas universitarios de todo el país.
Con este proyecto de ley, se prohibiría a las universidades estatales cumplir con los altos estándares de las agencias nacionales de acreditación, y tendrían que adherirse a los estándares más bajos del estado que requieren, por ejemplo, la censura de material en una serie de disciplinas (ver HF 269).
La facultad, personal y los estudiantes de UNI acaban de emplear cinco años y mucho dinero en la construcción de un plan de estudios de educación general de última generación llamado UNIFI –UNI Foundational Inquiry–, que se inauguró en 2022. (Ver https://undergraduatestudies.uni.edu/unifi). El plan de estudios de UNIFI requiere que los estudiantes tomen cursos de educación general en siete áreas. Al mismo tiempo, los estudiantes también pueden obtener uno de los certificados adaptados a sus áreas de estudio que están integrados en el programa, uno de los muchos componentes que faltan en el proyecto de ley de educación general que quiere imponer la legislatura. El programa UNIFI incorporó en su diseño opciones para los estudiantes, donde no están obligados a tomar cursos específicos, sino que se les da una variedad de opciones en todos los campos de estudio para completar el programa.
Desafortunadamente, el texto del HF 401 propone que las tres universidades estatales de Iowa adopten un programa de educación general mucho más limitado, creado por una organización con sede en la ciudad de la ciudad de Nueva York que busca que los 50 estados se ajusten a su plan político.
El proyecto de ley vuelve a censurar a los profesores, prohibiendo contenidos “que enseñen políticas de identidad o se basen en teorías de que el racismo, el sexismo, la opresión o el privilegio sistémicos son inherentes a las instituciones de los Estados Unidos de América o del estado de Iowa”.
¿Cómo, por ejemplo, podrán los instructores bajo esta censura explicar los acontecimientos históricos de la 14.ª Enmienda (1868), que otorga derechos de ciudadanía e igualdad de protección ante la ley a los afroamericanos, y la 19.ª Enmienda (1920), que otorga a las mujeres el derecho al voto, sin explicar el racismo y el sexismo inherentes a las instituciones de los EE.UU. en ese momento?
En general, estos tres proyectos de ley amenazan el núcleo de la misión de las universidades de Iowa.
“Estas leyes harían un gran daño a la posición en la nación de las universidades estatales de Iowa”, dijo Robert Earle, vicepresidente de United Faculty. “Los contribuyentes de Iowa han apoyado la construcción de tres de las mejores instituciones de educación superior en el país. Pero estos proyectos de ley socavarían esas reputaciones, ganadas con tanto esfuerzo, ya que sus estudiantes potenciales no querrán asistir a universidades que operan bajo la censura impuesta por el gobierno”.
Las universidades públicas de Iowa tienen una misión amplia y un enorme impacto económico en el estado.
El Código de Iowa requiere que la Universidad del Norte de Iowa “ofrezca cursos de instrucción de pregrado y posgrado, realice investigaciones y brinde servicios de extensión y otros servicios públicos en áreas de su competencia para facilitar el desarrollo social, cultural y económico de Iowa”.
Según la Junta de Regentes de Iowa, las tres universidades estatales contribuyen colectivamente al menos 15 mil millones de dólares anuales a la economía del estado de Iowa.
United Faculty, establecida en 1976, es el principal agente negociador de la facultad de la Universidad del Norte de Iowa, y está afiliada a la Asociación Estadounidense de Profesores Universitarios (AAUP, por sus siglas en inglés) y la Federación Estadounidense de Maestros (AFT). El sindicato representa a más de 500 miembros de la facultad en el campus de UNI.